Cita con el cantante: Pedro Antonio Zape

“Entren el ganado” decía Pedro Antonio Zape Jordan cuando estaba en la finca familiar ubicada a 6 o 7 minutos de su casa en Puerto Tejada. Las risas aparecían después al ver que solo había una vaca, la cual, en acto de generosidad, se la había regalado a sus hijos y a sus nietos; todos tenían que ver con el ganado.

Hijo de Pedro Antonio Zape Ortiz y María Jordan, Zape creció cerca al río Cauca del cual ayudaba a sacar baldados de agua a su madre para utilizarlos en las labores de la casa. Cuando no estaba jugando fútbol Pedro nadaba. Su infancia la compartió con 8 hermanos: Constantino, Concepción, Cecilia, Carlos, Jaime, Benilda, Rosario y Teresa; pero fue su hermano mayor, Constantino, quien más influenció no sólo en el futbolista sino en la persona en que se convertiría. Viéndolo defender los 3 palos de la portería, Pedro Zape se enamoró del rol del arquero y fue por medio de la admiración que sentía hacia su hermano que tomó la decisión de querer también ponerse los guantes y aprender a volar.

Trabajando en la elaboración del azúcar con el Ingenio La Cabaña, Zape obtuvo su primer sueldo y la posibilidad de ser reconocido por Víctor Celorio, quien resultó ser el entrenador del equipo de la empresa. De esta manera, inicia la historia de uno de los arqueros más importantes del fútbol colombiano, aquel que creció entre árboles, canchas de tierra y brazadas en el río.